
La esclava, por su parte, entrega su libertad y sus derechos a su Amo
Se volvió y miró sorprendido. Estaba en topless y se pasaba la falda por sobre las caderas. No podía mirar a su marido mas no podía rehusar a Frank. Una vez desnuda, se arrodilló y empezó a gatear hasta que la voz de Frank volvió a sonar.